Museo del Paste

NO LO RECOMIENDO VISITAR, no sé si por alguna razón el gordito de la recepción estaba de malas y desde que llegamos nos puso caras, las de la cafetería nos vieron que íbamos subiendo y casi casi nos cierran la puerta en la cara, la entrada está en 55 pesos y aún así no vale la pena el precio, NEFASTA ATENCIÓN POR PARTE DEL PERSONAL, como si les hiciéramos un favor.

La verdad es que la actitud del personal muy mala realmente no fue una buena experiencia, lo único que rescata es que preparas tu propio paste.

No te dejan tomar fotos y la cafetería realmente no tiene mucho. Entonces, no hay opciones de comida. Además, existen opciones de sabores muy limitadas para hacer tu propia pasta. El lugar es limpio pero pequeño y la mayor parte del tiempo del recorrido se realiza en una sala audiovisual donde te cuentan algo de la historia de Hidalgo.

Mala atención de la persona que te apoya a preparar tu paste, les falta capacitación para atender grupos grandes, el video bueno pero creo q deberia ser mas dinámico, la cafetería casi te corren al comerte de tu paste, creo q pueden mejorar mucho, tal vez extender sus horarios o verificar la dinámica de su servicio.

Muy sencillo no me gusto porque solo es una pelicula y una cocina, la chica que nos enseño hacer el paste andaba medio jetona

Mi visita fue en Julio 2018, la explicacion de elaboración de pastes no fue completa ya que nunca nos dijeron ingredientes, solo nos dieron una bolita de masa y papa. Las explicaciones en las otras salas tampoco fue muy buena.

Resulta una experiencia algo desalentadora cuando terminas el "recorrido".
Facinante al principio pero en cierto modo te queda a deber al final. Una lástima, porque el lugar es muy agradable y bonito, presume de tener una de las vistas más bonitas.

Como un referente es imperdible, pero creo que se necesita una mejor distribución de parte de los encargados, y más actividades, el hacer tu propio paste no es la gran actividad, necesita más profundidad y mejor explicación.

No creo que sea una vista tan increíble.

Me agradó hacer ni propio paste, aunque muy sencillo y además conocer un poco de historia de la ciudad

Muy bonitas instalaciones, cobran $35.00 la entrada que te incluye una clase de cómo hacer un paste, y al final te pasan a la cafetería a degustarlo. Una señora joven con mala actitud, de prisa y sin ganas nos "enseñó". Recomendaría que tuvieran una persona más gentil y con mejor actitud porque es quien da la primera impresión al visitante. También ojalá hubieran dos opciones de sabor, pues ese relleno de frijol es demasiado picoso, no lo pude comer. Para esperar el horneado vimos una proyección interesante de la historia del paste, y un recorrido por dos salas con un chico al que si le gusta su trabajo.

Musée pas très grand, mais plutôt sympathique. Amusant de réaliser son propre paste.
Attention: tout est écrit en espagnol.

El lugar cumple, pero hace falta más energía por el personal, se mostró un video de la historia, eso quita mucho a la experiencia, lo mejor. Hacer tu propio paste

Este lugar es un monumento a aquella comida inglesa que ya es hidalguense por tradición: el paste. Es fácil de llegar y acceder y lo mejor de todo, puedes hacer tu propio paste y vivir así la experiencia completa. Allí también cuentan con una cafetería, tienda para souvenirs y un área infantil.

En forma general te hablan de un poco de historia del paste, por otro lado te enseñan a hacer un paste.

Excelente museo, los guías son muy empáticos y carismáticos. Están disponibles para resolver cualquier duda. La única observación es que sí llegas a la hora en la que abre el museo es probable que aún no haya nadie listo para atender a los turistas. Nosotros entramos a la visita guiada 40 minutos después del horario de apertura del museo.

Excelente lugar para llenarse de información de la zona y muy buen lugar a para aprender y degustar del paste.

GENERAL:
Un buen museo para iniciar tu recorrido en Real del Monte, aunque es pequeño es muy agradable, ideal para familias y parejas, tu entrada al museo incluye la experiencia de hacer tu propio paste y poder comértelo al final del recorrido. La atención del personal es muy cordial, sobre todo la de los guías que mientras tu paste se cocina te van narrando la historia del pueblo.
El lugar cuenta con salas no solo dedicadas a la historia de Real del Monte, si no también con una sala dedicada a diversas exposiciones itinerantes sobre trabajos de artistas y personas locales que quieren exponer sus obras.

COSTOS:
La entrada tiene un precio de $35 pesos por persona, el estacionamiento es gratuito, sin embargo hay pocos lugares.

RECOMENDACIONES:
Es un museo que esta casi a la entrada del pueblo por que te recomiendo que sea de lo primero o de lo ultimo que visitas, que vayas temprano para que alcances lugar de estacionamiento o que lo dejes en alguna de las calles aledañas.

Es entretenido, muy limpio y un ambiente muy familiar! Es un buen sitio para disfrutar en familia y hacer tu propio paste!

Un sitio que muestra la historia de Real del Monte desde una perspectiva gastronómica, puedes hacer tu propio Paste, estará listo cuando termines tu recorrido!

Excelente lugar una muy buena explicación y la dinámica del pastel fue increíble 100% recomendable.
Revisar los horarios de los recorridos para no esperar mucho.

Muy padre lugar para la familia, preparas tu pastes y te lo entregan al finalizar el tour, te muestran un vídeo muy padre con historia de real del Monte del, pastes y lugares por visitar