La Hija del jarocho

Café de olla grande, los sandwiches están chafas y caros para lo que son. El café está bien.

El cafe capuchino con sabor a rompope. Es un saborizante artificial no rompope como tal. El cafe diluido. El chocolate es diluido también. Nada comparado con el café El jarocho. Los precios bien y la atención pésima ya que ni saludan, ponen sus jetas por pedir mucho (Un güero me atendió), no te dan un portavasos, los vasos son de unicel, no ecológicos, sin el logo de la empresa ni nota te dan. El jarocho los supera por mucho en cuanto a sabor, precio y calidad del producto. En esta sucursal muy mal el producto y servicio.

La experiencia es muy buena ya que el café es perfecto, variedad de sabores frío y caliente, diferente tipo de pan y galletas y aparte también hay tortas, excelente para cualquier momento mañana, tarde o noche

Justo frente a los Viveros de Coyoacán. Buen ambiente para platicar. Lo único malo es que no tienen baño.

Servicio rápido, probé el chocolate frío y supo muy bien. El ambiente es agradable para platicar.

Todo bien menos la horrible gente que esta por las mañanas que estorban el paso y no dejan transitar. Sus empleados pésimo servicio y muy majaderos.

Sus donas, tortas y baguette son geniales, no soy fan del café en general pero me pido un chai (que está muy dulce y puedo sacar dos de uno solo jaja) el servicio es bastante rápido aunque a veces tienen mucha gente

Para mí siempre es un gusto visitar, siempre adornan muy lindo y natural, los tes son muy buenos, las variedad de panes es vasta y las baguettes muy ricas!

Pésimo, que en la página encuentres "disposición en centro" y llegues al centros y te digan que ni hay. Por eso preferimos el delivery de 24 hrs

La atención fue muy buena, además de rápida y los alimentos y bebidas de buena calidad. El precio - calidad van de la mano.
Si llevas auto o motocicleta, a veces es difícil aparcar, ya que los vecinos "son dueños" de las calles.
Cuentan con las medidas de sanidad necesarias, aunque a veces hay algo de gente formada en la fila, principalmente en las noches.

Excelente atención al cliente, en calidad y oferta de productos, el servicio es rápido (para llevar o para comer ahí) siguen protocolos para evitar aglomeraciones. Un imperdible de Coyoacán si estas huyendo de las aglomeraciones, los vendedores ambulantes, los cantantes y otros personajes emblemáticos que suele haber en las cafeterías al aire libre.

Además del café, se siempre es bueno. Se pueden encontrar cosas como donas y baguettes. El lugar está adornado para temporada (navidad es muy lindo) las bancas que se encuentran afuera te invitan a descansar un rato

Todos los productos y alimentos son de excelente calidad, sabor y precios accesibles. Muy recomendables las tortas y el café.

Estoy asombrada de la mala educación de los dos muchachos que atienden allí, me contestaron horrible ante una pregunta que les hice y se me hace muy raro porque voy muy seguido y son amables pero hoy PÉSIMO

Debe ser prima del jarochito y sobrina del jarocho, no sé. Todo es de buena calidad y está a unas cuadras de metro Coyoacán y a unas cuadras del centro de Coyoacán (a la mitad).

Agusto! Sin embargo iba mucho antes xq tenía sanitario hoy, ya dicen que esta fuera de servicio, no piensan en la gente grande, que disfruta de un buen café al aire libre

En esta ocasión, la reseña es por la pésima actitud de los empleados, el café, panes, comida etcétera, normal. Resulta que después de retirarme del café, metros más adelante me percaté que no llevaba mi libro, regreso a preguntar a los demás consumidores y aprovecho para preguntar a los empleados si de casualidad alguna alma honesta se los dió por si preguntaban por él. Uno de los chicos me dijo que no lo habían entregado, di las gracias y al retirarme escucho claramente "pues aquí no es biblioteca", acto seguido regreso a preguntar que habían dicho, obviamente negaron las cosas, bueno, el hecho es que después de unos minutos de intentar aclarar la situación, les faltó valor para admitir su burla, incluso se negaron a llamarle al encargado para comentarle el hecho.
Escribo esto porque creo que el éxito de un lugar, va más allá de la calidad de la comida, para mí, es fundamental el servicio al cliente, incluyendo el respeto y cordialidad. En ningún momento los hice responsables, solo pregunté si alguien lo había encomendado, por mera empatía y atención.
En lo que a mí respecta, nunca regresó a lugares en los que no fui tratada cordialmente y con respeto, no importa que tan delicioso o bueno pueda ser, Café la hija del jarocho es uno de ellos, no está de más aclarar que los he visitado desde hace mucho tiempo.

Desde 1966, no tiene baños, no acepta tarjetas de crédito, y solo hay sillas en la calle, pero.es un centro energético obligado para visitar en Coyoacán para disfrutar de un café y un pan. Solo disfrútalo!

Yo no sé porque alguien Nos les Dice que No saben hacer Café, malo malo malo, La calidad de sus insumos es de lo más bajo y barato, No lo Recomiendo!

Siempre es un placer detenerse a disfrutar de un café (americano, moka, capuchino, espresso) o un té (sin novedad) y un rico pan dulce de Donas Americanas. El ambiente es muy local y de visitantes al parque de Viveros.