Sanborns

Fui al restaurante y el servicio de atención no fue el esperado. Supusieron que esperaría a que llegaran los que faltaban y sin preguntar asumieron que me iba a esperar a pedir hasta que llegaran. Y por otro lado el club sandwich que pedí fue una pieza muy pequeña de pan.

Ubicación, atención, limpieza muy bien, pero los domingos les ha dado por poner cantantes ¡MUY MALOS, desafinados, fuera de tiempo, se imaginan las canciones y la melodía, a un volumen muy alto que no permite platicar y convivir con las personas con las que queremos pasar un día de descanso.

Se come muy rico me atendieron muy bien pase un momento muy feliz se los recomiendo bye ambiente y my tranquilo

Buen lugar para comer, los alimentos tienen buen sabor, lo único es que en ocasiones los meseros te atienden de mala gana.

Este sambors tiene la ventaja de un espacio fuera de aire acondicionado y contaminado, porque los demás sambors tienen el aire acondicionado muchas veces innecesario y dañino para la tercera edad.

En cuánto a surtido de productos, ubicación y atención del personal, es bueno. Pero yo tuve problemas con un producto y las políticas para garantía son malas, creo que aplican en todos los sanborns, solamente por ello no recomendaría comprar en cualquier sanborns productos electrónicos.

Fue una buena experiencia, está muy bien surtido y además ubicado en un lugar muy fácil de llegar

Un excelente lugar para reuniones de 10 o menos personas. Y recomiendo que cuando no hay cupo de estacionamiento, acudir a la calle de Pensilvania

El servicio es bueno, la limpieza del lugar excelente, sin embargo deguste un pozole el cual le faltó sabor a.

Super buena atención de Francis en restaurante y Luz en dulcería, vaya que me hicieron sentir muy bien. De excelencia ambas!

Desayuné unos chilaquiles, simples totopos con una simple briseada de cheso de crema y salsa verde seca. La verdad la cocina muy práctica ha hecho que sea desabrida y caro.

Terrible desilusión! Años de no ir, han hecho pedazos el buen recuerdo que tenía de las enchiladas suizas. No estaban feas, estaban ¡horribles!
El lugar casi vacío (no había más de 4 mesas ocupadas) aunque era hora de la cena.
Con la horrenda comida y los precios carísimos no me sorprende nada.
Increíblemente el pollo del relleno en las enchiladas estaba DURO, jamás en toda mi vida me había pasado que lo que se supone es pechuga deshebrada estuviera dura, no sólo dura, además súper seca.
Como cereza del pastel la salsa aguada y el sabor muy diferente a lo rico que las recordaba (diferente FEO, muy feo)
En la tienda no había nadie, bueno si, los empleados
Perfecto sabemos que el dueño no tiene necesidad, ya es lo suficientemente rico, pero hay personas que trabajan ahí por necesidad. No puede ser posible que dejen morir a un establecimiento que antes estaba a reventar y con tanta tradición.
El director y sus colaboradores ¿Estarán consientes de lo fea y cara que está su comida? En realidad no creo que les importe mientras sigan recibiendo su abultado sueldo, sentados en sus elegantes escritorios.
Y ni que decir de una piñada que cuesta $150.00 (y eso que no tenía bebida alcohólica)

Cuando llegas la atención es buena, pero después se olvidan, le pedí la cuenta a unos supervisores que estaban platicando ando y jamas me la mandaron, mejor me fui diré to a. Alas y entonces rápido que llega la mesera, ya perdió su atención. Lastima

El lugar es sucio la atención de algunas personas son groseras sobre todo una de farmacia y también déspota, el pan ahora ya es asta las 9.30am lo cual yo en lo personal ya podría ir y ademas es pan frío de otro día y lo cobran como reciente

Un asco el desayuno, huevos con machaca, antes Sanborns era sinónimo de calidad, buenos productos, buena atención etc, ahora deja mucho que desear, empleadetes sin ganas de servir los baños son un asco las instalaciones descuidadas los libros y revistas sin interés malo malo

Mal servicio, frío y sin interés, creo que ha Sido el peor restaurante de la cadena Sanborns, deben revisar el servicio en esta sucursal.

Sanborns Taxqueña
Con suficiente tiempo en este lugar se ha convertido ya en habitual sitio de la zona para gustar del tradicional menú de su restaurante y de la buena calidad de productos que ofrece en la tienda de esta cadena con bastante tiempo de existencia.

Un sitio para compartir una buena plática con los amigos acompañados por alguno de sus platillos o un café.
También se puede aprovechar la visita y adquirir algún otro producto de los muchis que tienen, un libro, una pantalla o medicina.

Me encantó la atención por parte del personal es respetuosa, amistosa, muy agradable y el restaurante con platillos de primera.

En general, bien.la tienda limpia y ordenada, como siempre. El restaurante muy limpio. Los alimentos de muy buena presentación y preparación, aunque a la mesera que nos atendió le tuvimos que estar pidiendo prácticamente todo. Los baños en bastante buenas condiciones para tratarse de Sanborns. Hay estacionamiento. Aceptan pagos con Tarjeta. Lo recomiendo sobre todo por la limpieza y la calidad de los alimentos.